Sincroniza tu mente y cuerpo para prevenir que esos kilos de más ingresen como audaces enemigos de la belleza corporal que tanto cuidamos.
Camina al rededor de tu casa y evita oler, ver cosas que puedan despertar tu apetito, en lugar de esto escucha música te relaja y te mantiene entretenido.
Estimula otro sentido que no sea el gusto, los ejercicios, es la forma más efectiva de mantener al margen el apetito, elimina el stress, te sentirá liberada y mejor contigo misma.
Empieza el día con ejercicios de calistenia, para afirmar tu estómago y tus extremidades, de pasada corriges la postura.
Es preferible organizarse y hacer los ejercicios muy de mañana así no tienes la excusa de no hacerlos por falta de tiempo.
Evita usar ropa ancha, usa ropa que te haga sentir regia, y demostrar que estás orgullosa de tu figura.
Organiza días llenos de actividades evitando en todo momento sentirte aburrida y más susceptible a las tentaciones.
Frecuenta personas que tengan buenos hábitos alimenticios, así podrás imitar en ciertas situaciones que se te presenten.
Come solo cuando tengas apetito, y la cantidad que necesites, halaga el plato servido, disfruta el aroma y elogia el plato servido, descansa entre bocado y bocado, bebe abundante agua.
Apenas sientas que comiste suficiente, retira el plato de vista para evitar las tentaciones.
Examina y busca la causa que te hace comer en exceso, muchos son los motivos que nos inducen a estos malos hábitos, ansiedad, tristeza, stress, aburrimiento,
Con todas estas reglas podrás controlar el exceso de peso.
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